Fuera crucifijos de las escuelas públicas

Recuerdo yo cuando era pequeño en el Eugeni D'ors, mi cole de la EGB. Recuerdo que en las aulas había crucifijos. Una rémora del pasado franquista, en el que la religión de estado, no podía ser de otra manera en esa dictadura, se imponía a todo quisqui.

Un par de décadas después, aún quedan crucifijos de esos. Mi opinión es que, por supuesto, esos símbolos religiosos deben ser retirados de los centros públicos y concertados.

¿Por qué? Bueno, la razón fundamental es que si el centro no es religioso, ¿A qué viene eso? ¿Verdad que nos chocaría y/o escandalizaría una foto de La Meca, lugar santo del Islam? Pues esto es lo mismo. No hay derecho. Si quieren practicar una determinada crecencia, que lo hagan en sus casas y en sus templos. Sí creen en el poder de Dios nuestro Señor y en la imagen de Jesucristo, perfecto. Pero que no me obliguen a mí ni a nadie.

El otro motivo es que el Tribunal de Estrasburgo, argumenta que este tipo de emblemas atenta contra la libertad religiosa (de los que no se proclaman cristianos). Y es que en toda Europa, España incluida, la religión dejó hace tiempo de ser cosa del Estado, para formar parte de las creencias personales. Menos mal, porque debe haber muy pocos países en el mundo, por no decir ninguno, que sean prósperos y confesionales a la vez.

Hay quien dice que no se debería quitar, pues la cruz forma parte de la cultura europea. Falso y peligroso. Falso porque la mayoría de Europeos no son practicantes de ninguna religión. Falso en segundo lugar porque la cultura europea es laica, no religiosa. Y peligroso porque también era costumbre hasta no hace tanto que las mujeres no tuvieran derechos (especialmente cuando la Iglesia era quien dictaba las normas) y a nadie se le ocurriría mantenerlo.